Hoy en día, el tocadiscos es empleado mayoritariamente en la escena DJ, pero aún hay gente que prefiere consumir su música en formato vinilo. La producción y venta de vinilos ha vuelto a aumentar tras años de declive y también a inspirado la invención de diferentes sistemas DVS como Final Scratch, Traktor o Serato, que emulan un tocadiscos de manera digital. En el ámbito audiófilo se recurre a los tocadiscos accionados por correas. El tocadiscos DJ, sin embargo, exige más potencia de tracción y por lo tanto suele utilizar un accionamiento directo para que el scratching y la manipulación musical se puedan realizar a tiempo real. Los tocadiscos con interfaz USB integrada son cada vez más populares, porque con ellos se puede digitalizar con bastante facilidad.