El Warm Audio WA-67 combina una réplica exacta de los circuitos de válvulas del original con la tecnología de componentes modernos, lo que le proporciona un micrófono con un sonido de época, cifras de ruido significativamente mejoradas y un sonido estable a lo largo del tiempo.
Warm Audio ha modelado minuciosamente la cápsula a partir de la original , de modo que la respuesta de captación, la respuesta en frecuencia y la sensibilidad se ajustan a sus valores con bastante precisión. El elemento activo del circuito de amplificación es el pentodo EF-86, el tubo de electrones clásico más desarrollado, que se sigue utilizando hoy en día en los nuevos diseños de la tecnología de estudio y de alta fidelidad. Además, tiene -en contraste con el EF14k del U-47- la ventaja de que se sigue construyendo y se puede obtener de forma económica en alta calidad y cantidad.
Warm Audio también prestó atención a la calidad de los demás componentes y sólo utilizó condensadores y resistencias seleccionados de fabricantes de marcas reconocidas. Después de la cápsula y el diseño del circuito, el transformador de salida tiene una influencia decisiva en el sonido del micrófono porque se sitúa en último lugar en la cadena de señal. Por ello, Warm Audio se ha asociado con el fabricante sueco de primera calidad Lundahl y ha hecho desarrollar un transformador de gran núcleo que está diseñado precisamente para la impedancia de salida del antiguo circuito de válvulas y que, al mismo tiempo, sólo influye en el sonido allí donde está previsto: Se supone que hace que los bajos sean más ricos y los agudos más brillantes. Para que este sonido creado con tanto esmero llegue finalmente al preamplificador de la forma más intacta posible, Warm Audio incluye un cable de conexión del fabricante suizo Gotham, conocido desde hace años por su cableado de estudio de la más alta categoría de precios.
Gracias a todo este esfuerzo, el Warm Audio WA-67 es capaz de ofrecer un sonido convincente, cálido y completo . Es adecuado para casi todas las fuentes de señal: Para voces, en amplificadores de guitarra, en baterías, por ejemplo, en micrófonos Glyn-Johns, para guitarra acústica, piano y vientos de madera o cuerdas. En la microfonía de sala, siempre que la sala tenga un buen sonido y la fuente no sea estridente, puede desarrollar su fuerte y detallada banda de agudos en todo su potencial.